Repudiamos la ejecución de Cristian Ferreyra del Mocase-Vía Campesina
Ayer, en el día de la militancia, mientras estudiábamos, trabajábamos, debatíamos, mientras leíamos las palabras de Jauretche sobre el precepto que debe guiar al militante, “luchar por la igualdad entre todos los seres humanos”, recibimos la noticia del asesinato de Cristian Ferreyra, de 23 años, muerto de un escopetazo por defender su tierra en Santiago del Estero, el territorio comunitario que desde hace varias generaciones habita su familia y su pueblo.
Integrante del Movimiento Campesino de Santiago del Estero (Mocase-Vía Campesina), miembro de la comunidad indígena lule-vilela de San Antonio, Cristian fue víctima del accionar de sicarios de empresas del campo que, en su afán de lucro, desprecian la vida y los derechos ancestrales de los pueblos originarios, reconocidos por la Constitución Nacional, el Código Civil y leyes específicas, que el Poder Judicial raramente aplica.
Repudiamos la ejecución de Cristian, exigimos que se detenga a sus asesinos materiales e intelectuales, que se cumpla con la ley y se la haga cumplir. Honramos su memoria en el reconocimiento de su lucha y reclamamos justicia para él y toda su comunidad ultrajada.
A Cristian lo mataron un día antes de una asamblea que se haría en su casa para frenar el avance del desmonte. Murió “a manos de la raza maldita de los explotadores y sus mandaderos”, como dice Jauretche. Como un militante, haciéndoles frente.